Dice una antigua frase griega “el hombre es la medida de todas las cosas”. Con los Procesos Cognitivos nos damos cuenta que el mundo es la construcción que se da en virtud de nuestras estructuras cognitivas en interacción con el ambiente. Ser la medida del mundo, hace de nosotros una riqueza igualmente infinita. ¿Cuánto es tu valía y tu tamaño? ¡Continúa leyendo para que lo descubras!
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¿Qué son los Procesos Cognitivos?
Los Procesos Cognitivos hacen parte de una totalidad más extensa entendida en términos de desarrollo holístico de la psicología del individuo, abarcando sobre todo desde la edad del neonato (desde el nacimiento a 1 mes) hasta la adolescencia. Sin embargo, se puede prescindir del enfoque holístico (o nematológico) y abstraer una parte referida a los procesos de la cognición.
Además, el espacio cognitivo se puede entender como los aspectos, términos, partes y relaciones que acontecen en el conocimiento, sea su lugar propio la subjetividad o el mundo interno del individuo. Los procesos de dicho espacio serían todas aquellas transformaciones, movilidades y cambios por los que éste atraviesa y fructifica.
La “tabula rasa” que se supone es el individuo, se despliega enriqueciéndose a través de la interacción con el mundo que le rodea. Por ello, los Procesos Cognitivos dan cuenta de la unión bicondicional entre el microcosmos y el macrocosmos, el mundo interno y externo del humano.
Etapas de los Procesos Cognitivos a través de la vida
Para que exista la cognición, su desarrollo empieza a través de estímulos que se aplican sobre lo sensoriomotor, lo que lleva a la habituación o condicionamiento. Luego, hay una repetición de conductas que llevan sobre todo a resultados agradables, transformándose en una conducta dirigida a metas. Pasado lo cual, se llega al desarrollo de conceptos o categorías.
Se entra entonces, a una etapa preoperacional, reconociéndose relaciones causales, comprendiendo elementos componentes de la familia. Se empieza a tratar en términos de naturaleza simbólica.
Así, la imaginación hace su aparición. El paso subsiguiente es el desarrollo lógico aplicado a lo concreto, pasado lo cual es posible el desarrollo de la capacidad de pensar de manera abstracta y hacerse de la utilización del razonamiento científico.
En términos sucintos, se da un tránsito desde la capacidad de representar manifestaciones sensoriales (prenatalidad-primera infancia), pasando por la percepción (segunda infancia-tercera infancia), hasta la consecución de la facultad de abstraer o entendimiento, es decir, la capacidad de hacer conceptos universales, lo que deviene posteriormente en la conquista del desarrollo moral (adolescencia-20 años).
Características de los Procesos Cognitivos
Los Procesos Cognitivos nunca estarán clausurados o cerrados, sino siempre tenderán a una adecuación con el mundo que le rodea. Ellos tienen como características comunes:
- La organización: consiste en la regla matemática “ir de lo más simple a lo más complejo”, es decir, ir de lo obtenido en esquemas simples hacia sistema más complejos.
- La adaptación: es la capacidad de adecuarse a lo que impone el ambiente.
- La asimilación: consiste en la versatilidad de la información nueva aprehendida para que encaje con las estructuras internas actuales.
- La acomodación: es su contrario, la versatilidad de las estructuras internas actuales gracias a la nueva información aprehendida.
Por último, se tiene que el humano obedece a una ley de autorregulación u homeostasis, es decir, siempre tenderá al equilibrio, hace uso de la asimilación y de la acomodación en la interacción con el ambiente.
